Postulados Conceptuales
Se entiende por modelo pedagógico una forma que adopta el Gimnasio para seleccionar, organizar, construir y evaluar la forma de alcanzar y desarrollar el conocimiento en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Se entiende, además, que construir conocimiento es una forma particular de generar impacto en la cultura, en el medio ambiente, en la ciencia, en la tecnología y, en general, en el pensamiento transformador e innovador. El Gimnasio acoge una perspectiva diferente a la de la escuela clásica individualista, descontextualizada, que fragmenta el conocimiento y lo separa del mundo y de las vivencias. Propone, en cambio, un aprendizaje contextualizado, cargado de experiencias, con la participación activa y entusiasta de los estudiantes y la conexión de estos en la comunidad en donde interactúan.
Así, los procesos de enseñanza y aprendizaje en el Gimnasio tienen como objetivo ayudar al desarrollo de las capacidades, competencias y cualidades humanas que requiere un ciudadano contemporáneo. Para ello, es fundamental que los estudiantes comprendan el mundo en el que se encuentran desde una postura crítica y, teniendo en cuenta sus potencialidades, contribuyan no solo a su progreso, sino al mejoramiento de su entorno y, por ende, de la sociedad.
Estas ideas que cobijan el proyecto educativo se fundamentan en el modelo autoestructurante y reconoce los principios del constructivismo, la Escuela Activa, y el interaccionismo. Estos principios enmarcan una manera de concebir el acto educativo y sirven de brújula en el momento de pensar cómo se potencia el desarrollo de los estudiantes, cómo se aprende, cómo se enseña y cuáles son las metodologías y didácticas más apropiadas para la formación de los ciudadanos del siglo XXI.
Cada una de estas perspectivas aporta referentes conceptuales que proporcionan un marco general del enfoque que desarrolla el Gimnasio. Desde esta mirada, se entiende al estudiante como un “constructor” activo de sus estructuras de conocimiento, sin negar la actividad del maestro y el contexto social y cultural como mediadores que hacen posible el avance y el desarrollo del estudiante.
El rol del maestro ya no es el de “transmisor de información” en el sentido tradicional de la enseñanza. Es, sobre todo, un generador de posibilidades que estimula la curiosidad y ayuda a los alumnos a desarrollar sus capacidades. Pues se reconoce que aprender significa, sobre todo, adentrarse en un mundo de incertidumbres, en territorios desconocidos, donde el aprendiz indaga, experimenta, se equivoca. El error no significa fracaso, sino una oportunidad para seguir aprendiendo. Desde esta perspectiva, la labor del maestro es la de mantener viva la llama de la pregunta, estimulando e inspirando a sus estudiantes. Esto entendemos por Constructivismo.
Por su parte, la Escuela Activa, dentro de sus principios orientadores, sostiene que, a partir de la experiencia propia e individual, se logran los aprendizajes. Por eso concibe a un estudiante propositivo, que lee su entorno, se pregunta, identifica situaciones problemáticas. El estudiante deja de ser un receptor pasivo para ser reconocido como un sujeto social, protagonista del aprendizaje.
Finalmente, el interaccionismo reconoce la importancia que tienen en el aprendizaje y en el desarrollo las interacciones de los sujetos, pues precisamente en el intercambio de ideas, en el reconocimiento de puntos de vista divergentes, en el apoyo de pares, se negocian significados. Una consecuencia principal de esta concepción es la transformación de las relaciones que se dan dentro del aula de clase, pues se trata de posibilitar múltiples interacciones y hacer visible que en la riqueza de los intercambios con los otros ocurre el desarrollo.
Consecuencias de los postulados conceptuales en la práctica pedagógica
Entendemos que estas relaciones del aprendizaje, desde una concepción que conjuga el constructivismo, la Escuela Activa y el interaccionismo, se opone a la idea de aprendizaje como recepción pasiva y como tarea solitaria y descontextualizada. Precisamente, el Gimnasio enfoca la atención en la construcción de experiencias significativas que involucren activamente a los estudiantes teniendo en cuenta sus saberes previos, sus intereses, sus necesidades y capacidades.
Dentro de este contexto se señalan tres principios básicos. En primer lugar, se entiende la complejidad del aprendizaje en términos de desarrollo de subjetividades, potencialidades y talentos. En segundo lugar, se concibe la enseñanza como la organización y creación de condiciones, dispositivos e intervenciones que favorecen el desarrollo y la construcción de conocimiento por parte de los alumnos, además del aumento de la confianza en sí mismos como aprendices, la perseverancia y el entusiasmo por aprender individual y colectivamente. En tercer lugar, reconoce que los procesos de enseñanza y aprendizaje se dan dentro de un sistema didáctico enmarcado en un ambiente participativo que vincula los contextos institucionales, sociales y políticos.
Desde estos principios, se promueve en las prácticas pedagógicas un enfoque educativo centrado en el estudiante, que rescate los principios de la Escuela Activa, que supere los ámbitos disciplinares de las áreas del conocimiento, orientado al aprender a aprender, que conciba la lectura y la escritura como prácticas sociales, fundamentales para interpretar, criticar y transformar el mundo, que además reconozca y reivindique la importancia del conocimiento matemático y científico para comprender el mundo, que supere el estar centrado en la enseñanza para promover el desarrollo de los estudiantes y sus aprendizajes. Una educación que tenga en cuenta la evaluación formativa, en donde se haga énfasis en los desarrollos alcanzados y que propicie diferentes didácticas, articuladas con el uso del conocimiento en la resolución de problemas.
Ejes Transversales
Los ejes que articulan la propuesta pedagógica están estrechamente ligados a los desafíos que surgieron en la mesa Vuelo al Bicentenario. Es así como en el reconocimiento de la potencia del lenguaje, la investigación, la Pedagogía por Proyectos, el pensamiento crítico y científico, la utilización de las nuevas tecnologías y la formación ética se convierten en los ejes transversales que articulan y toman cuerpo en la propuesta pedagógica del Gimnasio que se refleja en los planes de estudio y en las actividades realizadas en todos los campos del saber.

Queremos a nuestros Maestros Montessori – 1A
El Lenguaje
El lenguaje está indisolublemente ligado a la esencia de lo humano. No existe actividad que no esté mediada por él; gracias a él, el ser humano interpreta la realidad, toma posesión de ella, construye significados y se construye a sí mismo como sujeto. A través de esta facultad, los seres humanos elaboran sus representaciones de la realidad natural y social, construyen los conocimientos, se comunican entre sí y recrean sus realidades mediante la creación de mundos posibles. Por estas razones el lenguaje es la columna vertebral de las prácticas pedagógicas de todas las asignaturas que conforman el plan de estudios del colegio.
El lenguaje se concreta en la lengua. Por eso es que el Gimnasio reconoce la importancia de aprender la lengua materna, pero también otras lenguas desde un enfoque discursivo que amplíe el horizonte del mundo. Nos acogemos al planteamiento de Halliday (1982) en cuanto a que “no sólo conocemos nuestra lengua […] como un sistema abstracto de signos vocales, o como si fuera una especie de texto de gramática con un diccionario adjunto; la conocemos en el sentido de saber cómo utilizarla, sabemos cómo comunicarnos con otras personas, cómo elegir formas de lenguaje apropiadas al tipo de situación en que nos encontramos […] sabemos comportarnos lingüísticamente”. (Pág. 23). En ese orden de ideas aprender otras lenguas implica reconocerse en la diferencia y comprender los modos de actuar de las culturas. Por eso, el Gimnasio apuesta por una educación bilingüe en la que el conocimiento de nuevos idiomas posibilite la comprensión del entorno cercano y global.
La Investigación
En el Gimnasio Moderno, la curiosidad es el motor que impulsa la indagación. Se busca propiciar una cultura de la investigación a lo largo de la vida escolar. Optamos por una enseñanza que privilegie la investigación como una manera de transformar el acto educativo y situar la importancia de leer y problematizar los contextos locales y globales.
La lectura del entorno y la pregunta constituyen entonces aspectos fundamentales de las prácticas en el Gimnasio. Por ello, en las diferentes secciones se posibilitan espacios para que a través de preguntas genuinas se inicien procesos de indagación, que poco a poco se convierten en ejercicios de investigación que permiten resolver esas preguntas inquietantes y significativas a través de búsquedas auténticas, que propicien nuevas comprensiones del entorno. La curiosidad y la mirada aguda del contexto se convierten en elementos claves para desarrollar estos procesos.

Salas de Informática para todas las edades.
El proceso de indagación se inicia en el Preescolar con los Proyectos de Aula, se fortalece en la Primaria y la Básica Secundaria con los principios de la Escuela Activa, y finalmente se culmina en la Semestralización con la presentación de proyectos de investigación y la profundización de las vocaciones.
Una formación que tenga como faro la cultura de la investigación permite un desarrollo integral, dado que es:
- Singular: pues a partir de las preguntas de cada estudiante se inicia el proceso, teniendo en cuenta sus expectativas, concepciones alternativas e intereses.
- Contextual: porque se concibe y se desarrolla a partir de la problematización de un espacio y tiempos determinados.
- Globalizadora: porque pretende que se pongan en práctica los conocimientos construidos de manera integrada para dar respuesta al problema planteado.
- Activa: ya que son los estudiantes los protagonistas del proceso de construcción del conocimiento.
- Colaborativa: pues es necesario el proceso de interacción, el diálogo de saberes, el intercambio de ideas con pares y con diversas fuentes.
- Transformadora: Porque el desarrollo de la investigación busca que el conocimiento sea relevante y útil, tanto para el estudiante como para la comunidad.
La investigación es una fuente inagotable de interrogaciones y de procesos de transformación y se comparte con Nussbaum (2010) la tesis de que tenemos que cultivar la imaginación de los jóvenes para que sean capaces de ver el mundo desde el punto de vista distinto a ellos mismos; una forma de lograrlo es a través de la investigación.
Pedagogía por Proyectos
La pedagogía por proyectos en el Gimnasio Moderno se entiende como un enfoque pedagógico centrado en el aprendizaje y enmarcado dentro de la Escuela Activa, el Interaccionismo y el Constructivismo social. En el enfoque por proyectos se valoran las motivaciones, intereses, conocimientos previos y preguntas de los estudiantes, y se ubican en el centro de un diálogo constante con otras comunidades de aprendizaje. Con ello se estimula el espíritu investigador, las preocupaciones académicas personales, el liderazgo y el profundo deseo de aportar soluciones a comunidades que lo necesitan en el entorno local y global.
En la pedagogía por proyectos convergen naturalmente la curiosidad, la construcción social del conocimiento, el pensamiento crítico, la conciencia social y ambiental, el trabajo colaborativo, la interdisciplinariedad, la investigación, el uso ético de la información y las tecnologías, y el rigor académico.
Estos proyectos parten de preguntas que son discutidas entre todos los miembros del grupo de estudiantes; el docente cumplirá el papel de mediador para que estén seguros de la tarea que emprenderán. Como lo señala el BIE Institute:
“Project Based Learning (PBL) prepares students for academic, personal, and career success, and readies young people to rise to the challenges of their lives and the world they will inherit ”. (p. 17)
Componentes esenciales de la Pedagogía por Proyectos
En el Gimnasio Moderno y de acuerdo con Steinberg (2002) y Lenz (2015) se pueden reconocer los siguientes elementos esenciales a la hora de plantear un proyecto dentro de esta pedagogía:
1) Autenticidad. Capacidad que del estudiante para producir conocimiento que tiene valor personal o social. Cuando se dice que algo es auténtico, normalmente significa que es real o genuino, que no es falso. En el sector educativo este concepto indica hasta qué punto el aprendizaje o la tarea es “del mundo real”. La autenticidad aumenta la motivación del alumno y su aprendizaje.
2) Problema o pregunta que plantea un desafío. El núcleo de un proyecto es un problema sobre el que hay que investigar y que hay que resolver, o una pregunta que se debe analizar y responder.
3) Camino estructurado. El proyecto debe retar al estudiante a adquirir y aplicar conocimientos y métodos de investigación de varios ámbitos del aprendizaje (STEM, Pensamiento Lenguaje y Sociedad, Estética, Desarrollo del cuerpo, Proyecto de vida). Dichas interacciones del estudiante con la información, el conocimiento, los maestros y los expertos le deben permitir al estudiante consolidar habilidades de pensamiento de orden superior, así como desarrollar su autonomía, y aprender a manejar de forma eficiente el tiempo para evitar malas prácticas como la improvisación o la procrastinación.
4) Investigación. El proceso de investigación lleva tiempo por lo que un proyecto durará más que unos pocos días. En el GM los proyectos tendrán una duración de uno o dos trimestres. Los proyectos deben usar diversas fuentes de información: combinarán la búsqueda de fuentes en internet, bibliotecas, bases de datos, con entrevistas a expertos, salidas de campo y experimentación.
5) Aplicación del aprendizaje. Es pertinente que los estudiantes desarrollen proyectos en los que pretendan solucionar problemas que estén relacionado con la vida real y con necesidades de comunidades específicas. El proyecto exige habilidades de autogestión, autonomía y manejo eficiente del tiempo. La aplicación del aprendizaje implica el uso de herramientas tecnológicas y de comunicación (TIC) de manera ética y responsable; así como de habilidades interpersonales: la comunicación efectiva, la conversación, el trabajo en equipo, la adaptabilidad, la capacidad de resolución de problemas, la creatividad, la ética, el manejo del tiempo.
6) Opinión y elección del estudiante. Tener opinión en un proyecto suscita un sentimiento de propiedad en los estudiantes, se preocupan más por el proyecto y trabajan más. Si los estudiantes no pueden utilizar su criterio a la hora de resolver un problema y responder a una pregunta clave, el proyecto se percibe simplemente como un ejercicio o como el seguimiento de una serie de instrucciones.
7) Exploración activa. Exige que el estudiante lleve a cabo trabajo de campo durante una cantidad de tiempo significativa. La exploración activa permite que los estudiantes se apropien de manera plena de los contextos y entornos de su investigación.
8) Reflexión. John Dewey, cuyas ideas siguen alimentando el pensamiento sobre el Aprendizaje basado en Proyectos (ABP), escribió: “No aprendemos de la experiencia. Aprendemos reflexionando sobre la experiencia.” Durante un proyecto, los estudiantes —y el profesor— deberían reflexionar sobre lo que están aprendiendo, cómo están aprendiendo y por qué están aprendiendo. La reflexión puede producirse informalmente, como parte de la cultura y el diálogo del aula, pero también debería ser una parte explícita del diario del proyecto, la evaluación formativa programada, los debates sobre algunos puntos del proyecto y las presentaciones públicas del trabajo de los educandos. La reflexión sobre el conocimiento y la comprensión del contenido adquirido ayuda a los alumnos a consolidar lo que han aprendido y a pensar en cómo aplicarlo en otros aspectos, más allá del proyecto.
9) Interacción con adultos. Le permite al estudiante conocer y observar adultos con trayectoria, experiencia y formación profesional en los distintos saberes de relevancia.
10) Producto público. Un producto puede ser algo tangible, o puede ser la presentación de una solución a un problema o la respuesta a una pregunta clave. En primer lugar, como ocurre con la autenticidad, el producto público añade un alto grado de motivación al ABP y anima a realizar un trabajo de alta calidad.
Adicionalmente, en este apartado es pertinente hacer claridad sobre los roles de estudiantes y maestros así:
Estudiantes. Se encuentran en el centro del proceso enseñanza-aprendizaje y constituyen el actor principal de su propio proceso de formación. Participa activamente en la construcción del proyecto e interviene de manera significativa en los procesos de toma de decisiones, realización y evaluación de los proyectos. Es protagonista de su propio proceso de aprendizaje, trabaja en equipo con sus pares, maestros y expertos. Desarrolla su creatividad, autonomía y responsabilidad, siendo consciente de su rol como agente investigador y transformador de su entorno. El estudiante investigador en el Gimnasio Moderno es metódico y se esfuerza, primero, por siempre buscar la verdad, es decir, investiga la realidad, los hechos y los datos. En segunda instancia, el estudiante interpreta los datos obtenidos con el fin de interpretarlos, describirlos o explicarlos. Su actividad lo motiva a apropiarse o incluso a expandir el acervo de saberes ya existente. En tercer lugar, el estudiante investigador en el Gimnasio Moderno aplica de manera práctica los nuevos conocimientos y los divulga o presenta a la comunidad académica a la que pertenece, así como también a la comunidad beneficiaria para quien dicho conocimiento es relevante o útil. (Calvert & Martin, 2001).
Maestro. El rol del maestro en la pedagogía de proyectos es el de mediar en los procesos de aprendizaje de los estudiantes. Un docente que con su ejemplo enseña a sus estudiantes a apreciar y a servirse de la incertidumbre, pues reconoce en ella una nueva oportunidad de aprendizaje y crecimiento tanto intelectual como personal. El docente en el Gimnasio Moderno debe diseñar las situaciones propias para el desarrollo de competencias, habilidades y aprendizajes significativos en los estudiantes. Ayuda a los estudiantes a cuestionarse, a autocorregirse, a organizar de forma eficiente los recursos, el tiempo, y los materiales para el desarrollo del proyecto. El docente del Gimnasio Moderno es un guía, pues orienta a los estudiantes investigadores a través de la constante reflexión, la evaluación y la discusión en grupo y les provee los andamiajes necesarios para optimizar sus procesos. De igual manera, los docentes gimnasianos fortalecen y dinamizan los procesos de evaluación buscando generar reflexión, autonomía y rigor académico en los estudiantes.
Corpus Argumentativo
Para definir y sustentar con precisión la pedagogía por proyectos para el Gimnasio Moderno se tomaron como referentes los siguientes autores y sus propuestas. Según Rincón (2006), la pedagogía por proyectos “permite articular la teoría y la práctica; superar en la vida escolar la insularidad y agregación de contenidos que hay que desarrollar porque ‘toca’, si no más bien para ‘verlos’ y así ‘abordar en la enseñanza lo que interesa, lo que es objeto de pregunta, lo que se quiere investigar porque es un problema sentido, no solo en el entorno sino también en los asuntos disciplinares”. Además, al mismo tiempo que se desarrollan procesos educativos significativos, se propicia una forma de aprender a aprender y se perfila un ciudadano autónomo en una sociedad democrática.
Por otro lado, Hernando (2015) plantea que en el enfoque educativo por proyectos los estudiantes son protagonistas de su propio aprendizaje. Son ellos quienes a partir de sus necesidades e intereses personales proponen diferentes ideas y estrategias, que una vez reflejadas en proyectos autónomos les permitirán conocer, aprender y apropiarse de manera significativa de los saberes provenientes de los diferentes ámbitos del conocimiento, dejando así de lado el asignaturismo. Los proyectos deben estar enmarcados en un contexto local, nacional o internacional, con el objetivo de lograr que los estudiantes aborden la resolución de dicho problema o pregunta como ciudadanos del mundo, conscientes del impacto que tienen sus decisiones y acciones, no solo en sus contextos más próximos, sino a nivel nacional e internacional; de igual manera, al ser los estudiantes conscientes del mundo que los rodea pueden ampliar sus entornos académicos, sociales y culturales.
Elementos como la curiosidad, la construcción social del conocimiento, el pensamiento crítico, la conciencia social y ambiental, el trabajo colaborativo, la interdisciplinariedad, la investigación, el uso ético de la información y de las tecnologías, y el rigor académico toman importancia dentro de esta pedagogía, ya que se consideran factores claves que buscan potenciar las fortalezas de los estudiantes y ponen en el centro de la acción pedagógica los intereses, motivaciones y conocimientos previos de estos con el fin de lograr que los aprendizajes obtenidos sean significativos para todos los miembros involucrados en el proyecto.
Articulación con el PEI
La pedagogía por proyectos está contemplada en el PEI del Gimnasio Moderno, pues constituyen materializan la Escuela activa, ya que “esta estrategia de trabajo facilita la inserción de la escuela en la vida”. Según Jean Vassileff (1997), la pedagogía por proyectos permite “el desarrollo de las capacidades de proyección de los sujetos en formación para lograr una transformación de su relación con el mundo”.
La Pedagogía por Proyectos implica acciones negociadas entre estudiantes y maestros, replanteando sus roles y haciendo que ambos interactúen en un proceso de enseñanza y aprendizaje en el marco de acciones cooperativas y acuerdos. La Pedagogía por Proyectos revela su potencialidad en la medida que posibilita la concreción del aprendizaje significativo[1], dándole un lugar a los intereses, necesidades, motivaciones y conocimientos previos de los estudiantes. El trabajo por proyectos convoca a maestros y estudiantes a conformar equipos interdisciplinarios, en donde se potencia la investigación y se resignifica la convivencia escolar, la construcción de saberes y visiones multiculturales del mundo.
Ruta de implementación
Aunque en la pedagogía por proyectos se deben reconocer ciertas etapas o estadios que permitan a todos los actores controlar y dar cuenta de los procesos, construcciones y aprendizajes, estas no se deben limitar a unos pasos que se deben cumplir rígidamente, ya que se corre el riesgo de dejar por fuera de la propuesta elementos determinantes de esta pedagogía como son la creatividad, la colaboración, la resolución de problemas y el desarrollo de competencias transversales. Por esta razón, en el Gimnasio Moderno se propone la siguiente ruta de implementación, expresada en las siguientes etapas que deben ser consideradas al momento de poner en práctica esta propuesta pedagógica.
Fase 1: Exploración Activa e Indagación inicial. El maestro genera un espacio para que surjan las preguntas y los intereses personales de cada estudiante, con el fin de realizar una primera aproximación investigativa a las inquietudes y necesidades previamente evidenciadas. Se da así inicio al proyecto desde los saberes previos.
Fase 2. Definición y planificación colectiva del proyecto. Al partir de un diálogo respetuoso y académico entre los estudiantes y los maestros, que tenga en cuenta los intereses, preguntas y realidades de los estudiantes se realizará la identificación del problema, la formulación de las preguntas orientadoras, se presentarán los objetivos del proyecto y los objetivos de aprendizaje. Se acordará un cronograma de trabajo con fechas claras y razonables, y se organizan los grupos de trabajo, que serán preferiblemente parejas o triadas. Como recomiendan Jolibert y Rincón se deben establecer contratos de actividades personales y grupales con los estudiantes. En esta fase, según Rincón (2006), se debe intentar responder a los siguientes interrogantes de manera colectiva y consensuada: ¿Qué se va a hacer aprender (tema)? ¿Sobre ese tema qué se quiere aprender (subtemas)? ¿Por qué? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Con quiénes (invitados, colaboradores), o con qué recursos? ¿Cómo se va a llamar el proyecto? Y ¿cómo se va a evaluar el proyecto? En esta fase se realiza una primera aproximación al producto final.
En esta fase los proyectos deberán considerar los aportes realizados por el Grupo de Apoyo Curricular (GAC), con el fin de tener una mirada sobre el proyecto desde los diferentes ámbitos de aprendizaje: STEM, Pensamiento Lenguaje y Sociedad, Estética, Desarrollo del cuerpo, Proyecto de vida
Fase 3. Determinación de contenidos de aprendizaje y competencias a desarrollar. En esta fase y de manera conjunta entre el maestro, los estudiantes, el entorno (local, nacional e internacional), la comunidad y los expertos se trabajarán los conocimientos y las competencias a desarrollar, así como la rúbrica de evaluación del proyecto.
Fase 4. Ejecución. En esta fase se desarrollan todas aquellas tareas previamente acordadas que permiten la construcción de saberes y experiencias de aprendizaje significativas para los estudiantes, las cuales deben estar mediadas por procesos de reflexión y evaluación formativa. Esta fase se enriquece conforme el proyecto se va desarrollando, es decir, el docente y el mismo estudiante-investigador se encontrarán con la necesidad de abordar determinados conocimientos y competencias. Es recomendable hacer uso de recursos didácticos actividades, talleres, secuencias didácticas que permitan al estudiante indagar y aplicar nuevos conocimientos que aporten las bases teóricas y el rigor académico necesarios para el proyecto y la construcción de aprendizajes significativos y las competencias del siglo XXI.
Fase 5. Socialización del proyecto. En esta fase se consideran los momentos de socialización o representación del producto final, sin importar la naturaleza de este producto, según los diferentes ámbitos de aprendizaje. Durante la socialización la presencia de pares expertos y miembros de la comunidad gimnasiana es de vital importancia para que participen del proceso de evaluación formativa y retroalimentación del resultado. Es deseable en esta fase se presenten los resultados del proyecto ante la comunidad beneficiaria.
Fase 6. Evaluación formativa y auténtica. La evaluación formativa se entenderá como un proceso que se desarrollará de manera transversal y progresiva en todas las fases del proyecto. Ello permitirá a los estudiantes y maestros tener información sobre las competencias y habilidades desarrolladas por los estudiantes. Igualmente debe permitir establecer niveles de desarrollo en relación con los aprendizajes alcanzados, la calidad del producto (independientemente de cuál sea), y su inserción en una comunidad de aprendizaje. Todo ello a través de rúbricas que consideran la autoevaluación, la coevaluación y la heteroevaluación.
La ejecución de las fases anteriormente explicadas, dependiendo del proyecto y de su nivel de complejidad, se llevará a cabo a lo largo de un trimestre, un semestre o un año. Al final de dichos tiempos factibles todo proyecto se dará por concluido. Dentro de las fases anteriormente descritas se debe considerar la presencia de actividades experimentales, excursiones, talleres, charlas, conferencias, desarrollo de guías, lecturas específicas, entre otras actividades que permitan a los estudiantes el desarrollo de las competencias específicas y transversales.
[1] Según Ausubel (2000), “Con la expresión «aprendizaje significativo» se hace referencia, ante todo, a un tipo distintivo de proceso de aprendizaje y también, aunque de manera secundaria, al resultado significativo de un aprendizaje –el logro de un nuevo significado-(…). A su vez el aprendizaje significativo como proceso presupone tanto que el estudiante adopta una actitud de aprendizaje significativa como que el material que aprende es potencialmente significativo para él, es decir, que es enlazable con ideas de anclaje pertinentes en su estructura cognitiva”. Los nuevos significados que adquiere el estudiante son producto de una interacción, no arbitraria, no literal, activa e integradora entre los nuevos materiales de instrucción e ideas pertinentes ya existentes en la estructura de conocimiento del estudiante. (…) las condiciones de aprendizaje presuponen la existencia de una actitud de aprendizaje significativa en el estudiante y de materiales de aprendizaje potencialmente significativos.
Relaciones entre el modelo pedagógico y la evaluación
El modelo pedagógico que plantea el colegio reconoce que las formas de aprender y enseñar se han modificado, y que la escuela de hoy exige nuevas maneras de relacionarse con el aprendizaje, puesto que, como ya se ha señalado, pensar y actuar en el mundo moderno implica reflexionar sobre cómo construye el ser humano conocimiento, cómo genera formas de aprendizaje que permitan la apropiación del mismo, cómo puede usarlas en relación con otros conocimientos y otras realidades, cuál es su papel en la cultura y en la historia. Estas relaciones con el aprendizaje establecen modos distintos de actuar, que dependen básicamente de lo que el Gimnasio considera importante potenciar en los estudiantes. Está claro que desde este modelo no son las conductas las que se evalúan sino las estructuras cognitivas, las formas de interacción social, las transferencias y la integralidad en la formación.
En ese sentido, el Gimnasio se distancia de cómo se ha concebido tradicionalmente la evaluación de los aprendizajes. La labor pedagógica de evaluación del Gimnasio no es tanto de carácter cuantitativo, que pretende estandarizar grupos para regular comportamientos o solo verificar conductas observables. La evaluación se asume desde el paradigma cualitativo, que hace énfasis en los procesos de aprendizaje y en las diferencias individuales de los estudiantes, no como una forma de medir aprendizajes, sino como la posibilidad de entender los procesos llevados a cabo por los estudiantes en la adquisición del conocimiento. De este modo, se reconocen los modelos de evaluación formativa y auténtica, en las que los estudiantes se autoevalúan, son evaluados por sus pares y por el maestro, lo cual implica la oportunidad de aprender de sus dificultades y mejorar la calidad de sus aprendizajes. La cuestión principal de la evaluación es entonces diseñar tareas que sean pertinentes y válidas y que ayuden a poner en relieve diversos aspectos implicados en el uso del conocimiento de los alumnos.
En consecuencia, la evaluación en el Gimnasio Moderno se caracteriza por ser continua, integral, razonada y cualitativa. Se convierte en una herramienta de reflexión sistemática sobre cómo se construye y usa el conocimiento, e involucra a todos los participantes del proceso educativo. En este sentido, no se reduce únicamente a constatar qué tanto ha aprendido o qué tanto sabe el estudiante, sino que tiene en cuenta aspectos fundamentales, como de qué forma lo ha aprendido, para qué le sirven esos aprendizajes, a través de qué vías ha llegado a ellos y cómo va a valerse de los mismos. Por eso, el colegio concibe la evaluación como una herramienta que busca valorar la formación integral del estudiante y asume el desarrollo del proceso educativo como un todo.
Desde esta mirada, la evaluación del aprendizaje, exige un proceso de planeación del ejercicio de evaluación en el que los resultados enriquezcan las miradas de profesores y estudiantes sobre los dominios de conocimiento, sistemas de pensamiento, lo que están consiguiendo aprender, para ajustar adecuadamente la ayuda que debe proporcionarse en cada caso, así la evaluación no es algo ajeno.
De esta manera, El sistema de evaluación del Gimnasio contempla cuatro niveles de desempeño. Estos cuatro niveles son: Reconocer, comprender, analizar y aplicar.
En el nivel de reconocimiento o recuerdo el estudiante se ha familiarizado con la información nueva, relacionándola con el conocimiento que ya sabe.
En el nivel de comprensión, Se debe evidenciar que el estudiante es capaz de organizar la información para lograr integrar el conocimiento en diferentes situaciones.
En el nivel análisis, el estudiante es capaz de clarificar la información existente descubriendo y examinando las partes de un todo. Al analizar el estudiante es capaz de articular las piezas que juntas constituyen un conjunto.
En el nivel de transferencia se debe evidenciar la utilización del conocimiento significativamente. La transferencia se basa en la capacidad del estudiante de aplicar sus conocimientos en contextos diferentes. El estudiante es capaz de reunir la información, generalizarla y resolver cualquier tipo de problema.
Con estos niveles se precisa el mejoramiento en los mecanismos de evaluación y se apunta a establecer no qué tanto no sabe el alumno, sino qué sabe, cómo lo sabe, cuándo puede activarlo, en qué contextos lo usa efectivamente, qué dificultades encuentra para hacerlo. De esta manera, la evaluación se convierte en una secuencia articulada de actividades conjuntas entre profesor y alumno. Estas acciones tienen una representación y una equivalencia en el Sistema Institucional de Promoción y Evaluación de los estudiantes, anexo a este documento.
Consecuencia de estas relaciones entre modelo pedagógico, estrategias de enseñanza – aprendizaje- evaluación, se puede sintetizar en estas ideas claves ¿Cómo aprendemos en el Gimnasio?: Aprendemos mejor cuando lo que estudiamos está relacionado con nuestra vida, con nuestro contexto, con nuestros problemas e intereses. Aprendemos con el ejemplo. Aprendemos preguntando. Aprendemos haciendo. Aprendemos de las experiencias. Aprendemos reflexionando. Aprendemos en la discusión con los otros. Aprendemos cuando aplicamos el conocimiento en un proyecto. Aprendemos resolviendo problemas. Aprendemos de nuestros errores. Aprendemos cuando tenemos contexto sobre lo que estudiamos. Aprendemos trabajando en equipo. Aprendemos cuando relacionamos las áreas del saber. Aprendemos jugando todo ello porque que el ambiente educa más que el discurso: un ambiente democrático educa más que horas de clases teóricas sobre la democracia. El modelo pedagógico del Gimnasio Moderno se asume, ante todo, como un sistema articulado que interrelaciona a sus actores y plantea una forma particular de concebir la práctica educativa teniendo en cuenta qué tipo de ser humano se quiere formar.
Ciudadanos de Colombia y del mundo: Internacionalización en el Gimnasio Moderno
La internacionalización e interculturalidad en el Gimnasio Moderno parte del principio del reconocimiento de la diversidad y del enriquecimiento que ésta trae para comprenderse desde lo local y lo global. Este marco permite establecer que la internacionalización busca reconocer un conjunto amplio de buenas prácticas, que permitan potenciar las experiencias de enseñanza y aprendizaje, pero además busca generar conexiones entre las culturas, reconociendo la riqueza que existe en ellas.
En ese orden de ideas, el programa de internacionalización busca establecer relaciones, negociaciones e intercambios culturales y desarrollar una interacción entre personas, conocimientos y prácticas culturalmente diversas. Esta premisa les confiere una dimensión internacional e intercultural a los mecanismos de enseñanza y aprendizaje, a través de la movilidad académica de estudiantes, docentes e investigadores, así como la participación en redes, la internacionalización del currículo, de la investigación y la gestión.
La propuesta de programas de movilidad permitiría a los estudiantes y maestros gimnasianos no sólo enriquecer experiencias académicas, sino también las culturales y sociales. El contacto con otras culturas puede servir para abrir nuevos horizontes intelectuales y desarrollar modos de pensamiento más tolerantes. Este tipo de intercambios pretenden fomentar la capacidad de aprender -siempre críticamente- de otros y que los otros también aprendan de nosotros, poniendo énfasis en que implica un intercambio intercultural que supone a las culturas en igualdad de condiciones, para que se enriquezcan mutuamente. El intercambio académico con otros países trae también la oportunidad de evitar la endogamia, identificada como una limitación importante, tanto en culturas europeas como en las de América Latina (Aghion et al., 2009; Salmi, 2013).

Jerómino Bieri Durán – 4B
Por otra parte, para un colegio que tenga como principio el desarrollo de una cultura de la investigación, la internacionalización es un escenario propicio para intercambiar experiencias y consolidar comunidad académica en los diversos escenarios, tanto de estudiantes como de profesores.
Los principios de la internacionalización se apoyan en los siguientes ejes:
Movilidad Académica
En cuanto a movilidad académica, el Gimnasio Moderno promueve el desplazamiento de su comunidad a otros lugares del país y del mundo, con programas de inmersión, campos de verano y programas de corta duración, como excursiones nacionales e internacionales, programas de emprendimiento y liderazgo y modelos de Naciones Unidas locales, nacionales e internacionales. Así genera oportunidades de estudio en el exterior para la comunidad a través de convenios de inmersión académico-cultural y posibilita el surgimiento de redes de trabajo colaborativo con el intercambio de prácticas de alumnos y profesores.
De igual forma, el Gimnasio promueve de manera activa programas nacionales e
internacionales de capacitación para sus alumnos y docentes.
Desarrollo Curricular
El desarrollo curricular está orientado hacia la construcción de acuerdos que aseguren el derecho a una formación de calidad a todos los estudiantes, por medio de contenidos nacionales e internacionales que faciliten la actualización en la enseñanza-aprendizaje e incorporen experiencias de innovación. El ámbito académico se ve permeado por plataformas digitales, que sirven para alojar material didáctico y actividades de aprendizaje en un entorno virtual, de manera lógica y organizada de acuerdo con la estructura de un programa académico, con la finalidad de establecer relaciones educativas orientadas al logro de aprendizajes y la formación de habilidades culturales y personales para enfrentar el mundo global.
El Gimnasio busca promover el estudio y perfeccionamiento de un segundo idioma en todos los estudiantes y profesores y desarrollar aptitudes interculturales, lo cual no sólo se refiere al conocimiento de otras culturas, sino también a la habilidad de evaluar las diferencias individuales y culturales en aras del individuo. Por su parte, se estudian referentes internacionales en Educación Positiva para incorporar innovaciones curriculares a nuestros programas.
Redes Internacionales
El Gimnasio Moderno ha establecido diferentes asociaciones y ha logrado entablar redes académicas a través de su Agenda Cultural y de la Escuela de Maestros, para facilitar la generación de alianzas y el intercambio de experiencias y conocimientos, así como la participación de nuestros docentes en programas académicos y proyectos de investigación conjuntos. La participación de diversos premios Nobel y de prestigiosos conferencistas a escala mundial enriquece el ámbito académico de nuestra comunidad.
De igual forma, como eje transversal, la literatura fomenta los diferentes estilos de aprendizaje y estilos preferentes impregnados por el entorno cultural.
El Gimnasio Moderno ha incentivado la creación de nuevos lazos interinstitucionales y ha cultivado los ya existentes a través de colaboraciones en diferentes eventos.
Como parte de la internacionalización y conformando así una participación en redes académicas, busca que los estudiantes respondan efectivamente a los desafíos sociales y académicos del siglo XXI, y se reconozcan como líderes de cambio e impulsen nuevas competencias como el trabajo en equipo, el liderazgo colectivo y la capacidad de generar cambios en la sociedad.
Para asumir los retos de dicha globalización, el Gimnasio Moderno está creando unas políticas de internacionalización acompañadas de una educación intercultural que se promueve en las aulas. De esta forma, los estudiantes tendrán la oportunidad de construir competencias cognitivas para la resolución de problemas, y competencias sociales que les permitirán interactuar con personas de diferentes culturas nacionales e internacionales. La internacionalización no se limitará a enseñar la visión internacional de un área de estudio, sino que se centrará en temas de cultura general mundial como la historia, las costumbres, la economía y la actualidad global. En años recientes, el Gimnasio ha entrado a hacer parte de redes internacionales como ASHOKA e IPEN (International Positive Education Network), que fomentan el liderazgo, la empatía, el emprendimiento, el trabajo en equipo, el florecimiento, la felicidad, el desarrollo del carácter y el trabajo en equipo, entre otros.
Estructura pedagógica: Las Secciones y Las Áreas
La misión del Gimnasio Moderno es educar integralmente a los estudiantes, permitir que los niños y los adolescentes encuentren en el colegio su luz propia. Su visión es que este ambiente de confianza y libertad, creatividad, amor al conocimiento y al esfuerzo personal, al compañerismo y la autonomía, al intercambio con el mundo y al conocimiento de su país, les permitan a nuestros egresados ser líderes en la universidad y en sus vidas, destacarse en la sociedad como ejemplos de libertad y honestidad, como personas capaces de construir junto a otros la innovación y la democracia donde quiera se encuentren.
Para esta formación integral nuestros estudiantes pasan por un camino de catorce años, donde las áreas y las secciones trabajan intensamente junto a ellos para su desarrollo y sus aprendizajes. El Gimnasio Moderno tiene cuatro secciones: el Preescolar, que va desde Montessori I a Primero; la Primaria, que va de Segundo a Quinto grado; el Bachillerato, de Sexto a Noveno grado; y finalmente, la Cuarta Sección o Semestralización, que abarca los dos últimos grados, décimo y once. Con excepción de la Cuarta, cada Sección comprende cuatro años. Este camino tiene a su vez un desarrollo transversal a cargo de las áreas del conocimiento, encargadas de estructurar el aporte de estas disciplinas al nivel que estén cursando los niños y los adolescentes.
El esfuerzo está en lograr una articulación cada vez más armónica entre las secciones, pues el objetivo final es el desarrollo del niño o el adolescente. Así mismo, las áreas, más que disciplinas cerradas, en una Pedagogía por Proyectos cumplen más la función de ejes o interlocutores en un diálogo abierto.
SECCIONES
El Preescolar
La Sección de Preescolar es la puerta de entrada al Gimnasio y el inicio de un gran recorrido que comienzan los estudiantes y sus familias en este significativo trayecto de la educación y la formación para la vida. El objetivo fundamental para esta sección es el acompañamiento amoroso, caluroso, claro y disciplinado de nuestros estudiantes. La sección está conformada por los grados Montessori I, Montessori II, Montessori III y Primero. Las edades de los niños están entre los 4 y 7 años.
Lineamientos y objetivos de la sección
La Sección de Preescolar es una prolongación de la familia en el colegio. Por lo tanto, temas como el cuidado, la protección, el interés, la seguridad y los valores constituyen las grandes metas de la sección, a tono con la filosofía de Ovidio Decroly y María Montessori, que reconocen al niño como el centro del proceso y como el protagonista del aprendizaje. El niño que ingresa a la Sección de Preescolar es considerado como un sujeto único, particular, que trae consigo una serie de conocimientos, experiencias y vivencias previas que van a determinar su modo de aproximación al Gimnasio, y desde la amplitud de esta mirada el Gimnasio se relaciona con cada uno de ellos a través de sus maestros, lo que permite la diferencia y la particularidad de cada uno de ellos. Creemos que el niño sólo puede considerar la existencia del otro cuando aprende a considerar su propia existencia.
El objetivo fundamental es inspirar a los niños hacia un desarrollo integral de sus hábitos y sus talentos, sus emociones, sus relaciones con los otros y con el contexto. Educamos en la integralidad para que:
- El desarrollo de su inteligencia emocional permita a los niños ser felices, emocionalmente estables, seguros de sí mismos, autónomos, disciplinados, claros y coherentes.
- Logren crear lazos y vínculos adecuados a través de sus relaciones interpersonales.
- Se despierte y alimente en ellos el sentido de la conciencia social.
- Sean ciudadanos solidarios, empáticos y sensibles a las diferencias.
- Puedan diferenciar entre lo correcto y lo incorrecto y su actuar esté mediado por la ética.
- Puedan desarrollar un pensamiento reflexivo y crítico que les permita ser activos en la toma de decisiones y, por tanto, tengan la capacidad de elegir y de actuar correctamente.
- Adquieran el conocimiento, la información y la cultura necesarios que les permitan en un futuro formar parte activa de las exigencias de un mundo globalizado y cada vez más pujante y exigente con sus ciudadanos.
Desarrollo pedagógico: trabajo por proyectos
La filosofía Montessori plantea que el niño aprende a partir de sus propios intereses, curiosidades y contexto, experimentando, haciendo, actuando, formando parte activa del proceso de aprendizaje a través de proyectos que vinculen sus intereses con las situaciones del mundo. La Pedagogía por Proyectos retoma estos principios pero reconoce, además, que el aprendizaje no es solo fruto de la relación del individuo con el medio, sino que se construye a partir de la interacción que establece con otros. Por eso, desde el preescolar se posibilitan aprendizajes contextualizados y significativos, así como la participación activa, creativa y guiada de los maestros en escenarios participativos en donde los niños desarrollan sus capacidades en un entorno donde la autonomía, la libertad y la cooperación son fundamentales.
El trabajo interdisciplinario es fundamental y el currículo está integrado desde los diferentes saberes. Se parte de una pregunta que pueda ser abordada por las diferentes disciplinas y solucionada con la participación de todas ellas. La integración de las áreas, a partir de los intereses del niño, hace que el aprendizaje sea significativo y cobre mayor valor. La integración de las diferentes áreas del conocimiento, su planeación y ejecución están dadas desde los planes de estudio, que son el eje fundamental de la práctica pedagógica.
Los maestros de la sección tienen, entre otras, la función de prolongar en el colegio la acción e influencia de los padres, así como articular el proceso formativo y académico. Realizan reuniones periódicas para planear las actividades de los proyectos, para valorar la adquisición de los conocimientos, el rendimiento individual y grupal de los alumnos. Como resultado final de cada proyecto de aula, los niños comunican a la comunidad sus hallazgos acerca de las preguntas que surgieron en su proceso de indagación y de comprensión del mundo. Por su parte, los profesores también se convierten en investigadores, pues a través de la sistematización de experiencias logran una reflexión profunda y situada de las estrategias que permitieron el desarrollo de los niños.
Por otro lado, el conocimiento de todos y cada uno de los alumnos es fundamental. Por esto, los directores de grupo se reúnen de manera individual con la coordinación y el psicólogo de la sección con el fin de dar un reporte, tanto académico como comportamental, de cada uno de sus alumnos. Este reporte es el consolidado de la información recopilada de todos los maestros del nivel. Como resultado de estos seguimientos, se dan recomendaciones tales como terapias externas, asistencia al Programa Institucional de Tareas Sistematizadas (PITS) que se ofrece en horarios extraescolares, citación de padres de familia para mantenerlos al tanto del rendimiento de sus hijos y apoyos pedagógicos, etc.
El seguimiento a los alumnos se realiza también durante las Direcciones de Grupo que se llevan a cabo de lunes a viernes. Los padres de familia son para el Preescolar un elemento definitivo en el logro de los objetivos. Por esto son citados de manera regular para participar de la resolución de conflictos de casos particulares, así como a talleres que permitan un mejor funcionamiento al interior de algunos cursos. También son invitados a las diferentes actividades que se programan para que puedan conocer y apreciar de cerca el trabajo realizado por los niños, tanto en lo académico como en lo personal. La formación integral de los alumnos se cumple también con actividades propias del Gimnasio Moderno, como las excursiones y las salidas pedagógicas.
La Primaria
La Primaria continúa con los esfuerzos formativos del Preescolar, atendiendo al desarrollo integral de los estudiantes. La sección les ofrece los elementos necesarios para desarrollar de manera armoniosa toda su potencialidad en las dimensiones espiritual, moral, socio-emocional, mental y física, que les permitan convertirse en jóvenes con cualidades y aptitudes valiosas para su bienestar y el de su comunidad. Creemos en una educación que acepta que cada estudiante es único y singular, con características, posibilidades y necesidades propias y, a partir de esta convicción, trabajamos por la construcción de una comunidad educativa que respeta y celebra la diferencia.
Lineamientos y objetivos de la sección
El trabajo en la formación ética y moral en la primaria plantea los siguientes objetivos:
- Propiciar el desarrollo de la autonomía moral de los niños, entendido como la capacidad para tomar sus propias decisiones sobre la base de valores morales y de relaciones de reciprocidad. Es necesario ayudarlos a reconocer, apropiarse y asumir valores y actitudes que les transmiten los diferentes ámbitos de socialización (la familia, el colegio, la sociedad). Como consecuencia de esta apropiación se da la capacidad de actuar por convicción.
- Favorecer la coherencia entre lo que se valora, lo que se dice y lo que se hace. Es necesario que reconozcan que al entrar a la primaria ya están en capacidad de utilizar su libertad para elegir cómo responder a los estímulos y a las situaciones. Se trata de ayudarlos a hacer un tránsito paulatino de la reactividad a la proactividad. El resultado de este trabajo con los niños es su capacidad para asumir la responsabilidad de sus elecciones, para establecer y cumplir acuerdos y para construir un proyecto de vida escolar.
- Lograr estos objetivos requiere reconocer que todo acto educativo tiene un carácter ético y, por consiguiente, que cada maestro y cada miembro de la comunidad están comprometidos con el proceso de formación ética. Es indispensable aceptar la necesidad de ser diseñadores y facilitadores de experiencias, vivencias y estrategias específicamente dirigidas a alcanzarlos. Los espacios dedicados a este trabajo en la primaria son: las direcciones de grupo, los encuentros matinales, las izadas de bandera, las excursiones, las convivencias, los talleres y los trabajos específicos desde las áreas de formación en la fe, ciencias sociales y ciencias.
Desarrollo pedagógico
El trabajo en la formación académica de los estudiantes de primaria del Gimnasio Moderno plantea los siguientes objetivos:
- Promover el vínculo con el conocimiento y fomentar el gusto por aprender. “Cuando nuestras actitudes y percepciones son positivas, el aprendizaje se enriquece. Trabajar por generar y mantener actitudes positivas hacia el aprendizaje es una responsabilidad compartida por los maestros y los estudiantes”, tal como lo señala Marzano (1998).
- Desarrollar actitudes y percepciones positivas hacia cada tarea (task), ayudando a los estudiantes a reconocer su valor y a reconocerse como aprendices con la habilidad necesaria para realizarla. Para ello, las tareas y actividades deben ser significativas, estar vinculadas a los intereses y las necesidades de los estudiantes; deben estar dirigidas a despertar su atención y propiciar discusión y debate. En el diseño de las actividades es necesario considerar siempre el conocimiento previo y la demanda cognitiva requeridos para realizarla.
- Desarrollar actitudes y percepciones positivas hacia el aula como comunidad de aprendizaje. Cada estudiante debe sentirse aceptado, valioso e importante y todas las interacciones deben estar enmarcadas en el respeto mutuo, para poder construir una sensación de seguridad emocional. Los estudiantes deben reconocer sus salones como lugares seguros, amables y cómodos; para ello se necesita establecer acuerdos y procedimientos que garanticen la seguridad física.
- Potenciar una cultura del pensamiento. Ron Ritchhart, (2014) propone que “es necesario cultivar el pensamiento profundo como una disposición, como un rasgo duradero, a través de tres prácticas pedagógicas: mirar de cerca, explorar diferentes posibilidades y perspectivas e introducir la ambigüedad”. En ese sentido, si aprender es consecuencia de pensar, debemos enganchar a los estudiantes con actividades que demanden pensamiento profundo, que promuevan la transferencia flexible de habilidades y conocimientos a nuevos contextos. Se comparte con Madeleine Hunter la idea que transferir es la base de toda creatividad, resolución de problemas y toma de decisiones.
- Fomentar una cultura de trabajo caracterizada por el esfuerzo y compromiso de dar siempre lo mejor de sí mismo. “Las personas son realmente felices cuando han logrado metas que han luchado. La felicidad (…) tiene mucho más que ver con la satisfacción de un esfuerzo personal. De manera que educar personas felices tiene que ver con ayudar en la construcción de las herramientas para cumplir las metas y realizar los sueños. El grado de realización personal es directamente proporcional al trabajo que invertimos en nuestros propósitos”. (Mauricio Nieto, 2015).
- Promover la autonomía intelectual. Pues como lo señala Kamii, (1985). “una persona intelectualmente autónoma es un pensador crítico y creativo, que tiene su propia opinión bien fundada”. Para alcanzar este objetivo nuestros estudiantes deben adquirir conocimiento por medio de la construcción interior, a través de la interacción con el medio ambiente. Debemos aprovechar la necesidad que tienen de darle sentido a su entorno, mediante respuestas a preguntas que los intriguen y los motiven a construir conocimiento creando y coordinando relaciones. Debemos trabajar, además, para que sus respuestas y conclusiones estén respaldadas por razones bien fundamentadas y coherentes.
- Finalmente, la educación en Primaria debe capacitar a nuestros estudiantes para responder de manera positiva todas aquellas oportunidades, retos, responsabilidades y experiencias que les proporcionará la vida en el bachillerato.

La cercanía del maestro con los estudiantes.
El Bachillerato
El Bachillerato es el entorno perfecto para que los estudiantes se preparen para su vida académica y vocacional. Por supuesto, es fundamental acompañarlos en ese crecimiento y comenzar a darles las herramientas necesarias para que en el futuro puedan iniciar la construcción de un proyecto de vida.
“El bachillerato debe formar el carácter, desarrollar la personalidad, crear hábitos de observación, de estudio, de reflexión y de trabajo; orientar y robustecer el sentimiento moral; despertar ideales de servicio a la comunidad. Así hemos procurado hacerlo en nuestra escuela”. (Libro La Escuela Activa. Selección de Textos. Nieto Caballero, 1987, p. 68).
Lineamientos y objetivos de la sección
El bachillerato debe entregarle al proceso de semestralización estudiantes que han fortalecido sus hábitos y cursado materias que les permitan asumir una decisión alrededor de temas vocacionales. Para este fin y atendiendo a las edades de los estudiantes, se debe trabajar en el fortalecimiento de los hábitos sociales y académicos y se debe apuntar a una formación moral sólida. Al finalizar noveno es importante que el estudiante tenga los hábitos y habilidades necesarias que se construyen desde el trabajo intra e interdisciplinario. Adicionalmente, al trabajar desde la adolescencia, debemos estructurar moralmente al estudiante para que podamos aportar a la sociedad hombres que: “trabajen por la paz, la equidad social, la sustentabilidad ambiental y la democracia, desde un actuar ético”. “…si el muchacho no ha aprendido a estudiar por su propia cuenta en la enseñanza secundaria, ¿qué podrá hacer en la vida o en el curso de sus estudios universitarios?”, frase publicada en el libro de selección de textos de don Agustín, La Escuela Activa (Nieto Caballero, 1987, p. 82).
Desarrollo pedagógico
En esta sección se sigue cultivando el gusto por aprender, el desarrollo de actitudes positivas hacia el aprendizaje, la disposición para complejizar y profundizar los conceptos fundamentales y se promueve la capacidad de desarrollar el pensamiento crítico desde la argumentación, y el ejercicio creativo desde la resolución de problemas significativos, para que los aprendizajes alcanzados promuevan la transferencia de los mismos en situaciones reales de uso.
Ahora bien, dado que en esta etapa del desarrollo de la vida de los estudiantes, lo fundamental es el reconocimiento de sí en relación con los otros, se promueve con mayor énfasis el aprendizaje colaborativo, las discusiones en grupo, el desarrollo de competencias comunicativas en interacción, pues la socialización y el vínculo con los demás resulta primordial en la construcción de su personalidad, pero también en la construcción del conocimiento, pues se reconoce que las competencias de interpretación e intervención de cada sujeto no residen solo en el individuo, sino en la riqueza cultural distribuida en cada contexto físico y social.
El trabajo en la formación académica de los estudiantes de bachillerato del Gimnasio Moderno plantea los siguientes objetivos:
- Seguir potenciando una cultura de desarrollo del pensamiento.
- Desarrollar la capacidad de aprender a aprender, pues en la sociedad actual es más importante que el contenido mismo del aprendizaje.
- Fortalecer las habilidades para indagar, seleccionar, elegir y relacionar, así como aprender a comunicarse asertivamente, presentando argumentos.
- Reconocer que el aprendizaje y el conocimiento descansa en la diversidad de opiniones, planteamientos y perspectivas.
- Comprender los contextos culturales donde surge el conocimiento, sus correlaciones con la historia, la economía y la política.
- Conocer en y para la acción. La idea de conocer en la acción, incluida la interacción corporal, experiencial y cognitiva. Se comparte con Pérez (2012) que “los seres humanos, en vez de representar un mundo independiente, actúan en un mundo, lo personalizan, intervienen en él y lo acomodan”.
- Desarrollar el pensamiento creativo.
Desarrollo emocional
La formación de la autonomía requiere ayudar a cada sujeto a revisar y reconstruir ese mundo complejo de representaciones, hábitos y creencias. Por eso, desde la sección se promueve el desarrollo de estrategias y procesos para ayudar a los estudiantes al conocimiento de sí mismos, y a la toma de decisiones informadas y personales.
Hacer énfasis en la importancia de conocerse a sí mismo es poder encontrar el sentido a las acciones y reconocer que es necesario aprender a estimarse y quererse y conocer sus propias fortalezas y debilidades, así como su origen y sus posibilidades de cambio. Estos son algunos de los aspectos que se trabajan en cada uno de los niveles:
Sexto grado. Es un curso que merece atención especial por ser el punto de transición entre la Primaria y el Bachillerato. El impacto que este tránsito tiene en los estudiantes es alto y ello hace que se deba trabajar mucho sobre el imaginario de ser los pequeños entre los grandes.
Séptimo. Los estudiantes de séptimo “juegan a ser grandes”. Después de un año de transición y adaptación, los jóvenes deben ingresar a séptimo, siempre que cumplan con los requerimientos para ello. En promedio, los muchachos de este grado tienen 13 años, la adolescencia aflora y, con ella, su reto a la autoridad, su dificultad con el orden. Su crisis de identidad hace arduo el trabajo con ellos. El “enganche emocional” con estos muchachos es fundamental; de ello depende una buena o mala relación con el adulto.
Octavo. Afianzamiento de estructuras de aprendizaje y de formación. Satisfechas algunas ansiedades, aparecen otras: la vida de jóvenes, las fiestas y todo lo que ello implica ya está presente en estos muchachos. En octavo muchos estudiantes afianzan su posición dentro del grupo y adquieren un mayor grado de madurez.
Noveno. El grado de Bachiller Básico. Preparación para la vida universitaria. Aunque a los estudiantes de noveno les faltan dos años para graduarse, comienza ya su preparación para la vida universitaria. ¿Qué carrera estudiar? ¿Cómo encarar los retos del futuro? Este es el momento para cerrar procesos en los que se han consolidado hábitos de estudio y metodologías de aprendizaje que buscan que el estudiante aprenda a aprender por sí mismo.
La Semestralización
A partir del año 2000 comenzó a implementarse la semestralización en el Gimnasio Moderno, un programa que nace con el propósito de articular la educación media (últimos dos grados de la escolaridad: décimo y undécimo) con la educación superior. El objetivo principal de esta sección, a través de las clases y de los encuentros matinales, las direcciones de grupo y las excursiones, entre otras, busca concluir de la mejor manera el proceso formativo de los estudiantes, forjando líderes al servicio de la innovación, la libertad y la democracia.
Los jóvenes que forman parte de esta sección oscilan entre los 16 y 18 años, y gran parte de ellos alcanzan la mayoría de edad en el grado undécimo. Luego de haber interiorizado principios y valores gimnasianos inculcados desde edad temprana, como la Disciplina de Confianza, los estudiantes piensan y actúan con libertad y autonomía enmarcadas dentro de un orden y unos valores éticos y morales, que les permiten desarrollar el pensamiento crítico, la reflexión y la creatividad.
Gradualmente, y a lo largo de cuatro semestres, los estudiantes adquieren mayor libertad, pero, asimismo, mayor responsabilidad. Con un plan de estudios más flexible, movidos por sus intereses y necesidades, los estudiantes tienen la posibilidad de ampliar la elección de las materias a cursar, lo que les permite explorar y profundizar sus vocaciones sin olvidar algunas materias básicas que responden a sus necesidades y se ajustan a las expectativas del currículo académico.
Lineamientos y objetivos de la sección
- Hacer un seguimiento al desempeño formativo y académico de los estudiantes.
- Atender y guiar a los padres de familia de acuerdo con las necesidades de sus hijos.
- Acompañar y apoyar a los maestros en su quehacer pedagógico.
- Informar de manera oportuna a la comunidad educativa (estudiantes, padres de familia y maestros) sobre las decisiones que se adopten en la cuarta sección.
- Revisar que los programas académicos y formativos que se lideran en los grados décimo y undécimo se lleven a cabo de manera adecuada.
- A partir del respeto, establecer normas y límites claros.
- Diseñar estrategias para la formación integral de los estudiantes.
- Propiciar espacios de diálogo entre los diversos estamentos de la comunidad (estudiantes, maestros y padres de familia).
- Generar espacios donde se puedan profundizar diversos hábitos de estudio que les permitan a los estudiantes apropiarse de elementos cruciales para asumir los retos universitarios y del mundo.
- Procurar un nivel de exigencia pertinente y adecuado para los últimos dos grados.
- Realizar evaluaciones periódicas que permitan reflexionar en torno al autoconocimiento y la autocrítica frente al oficio del maestro.
- Invitar a las familias a ser parte activa del compromiso que se requiere para el desarrollo formativo de sus hijos.
- Promover al interior de la sección procesos de lectura y escritura.
- Generar espíritu de colaboración.
Desarrollo pedagógico
Grado 10 (Semestres I y II)
Los estudiantes comienzan su adaptación para asumir los retos que trae consigo la semestralización. En este primer año cursan materias obligatorias de las siguientes áreas: ciencias naturales (física y química), matemáticas (cálculo), sociales, inglés, español y deportes, y eligen tres asignaturas: Estudios Profesionales, Profundización y Electivas (arte, música o idiomas).
- Estudios profesionales
Con el apoyo del Departamento de Psicología del colegio desarrolla un programa de orientación profesional para que los estudiantes realicen una exploración vocacional a partir de sus talentos y fortalezas. Asimismo, para vigorizar esta orientación, los estudiantes cursan asignaturas de diversas profesiones que les permiten ampliar las oportunidades de selección. Los maestros, en su mayoría, son exalumnos que vuelven al Gimnasio para compartir su experiencia de vida profesional.
Grado 11 (Semestres III y IV)
- Semestre III
En este semestre los alumnos cursan materias obligatorias de las siguientes áreas: ciencias naturales (física y química), matemáticas (cálculo), sociales, inglés, español, formación deportiva, Proyecto de Investigación, Filosofía, Producción de Textos y Deportes, y eligen tres asignaturas: Profundización, Electivas (arte, música) e Idiomas.
- Semestre IV
En este último período escolar, los estudiantes escogen la totalidad de sus asignaturas y tienen la posibilidad de cursar la materia de la carrera universitaria que más llame su atención, en las horas de la tarde. A su vez, deben cursar un seminario de profundización, una electiva, una materia básica, una tutoría, una materia de tecnología, una de idiomas y una de producción de textos. Se culmina el semestre con la sustentación ante un jurado del Proyecto de Investigación iniciado en el tercer semestre.
Proyectos de investigación
A partir de 2013 el colegio se crea un espacio formal de investigación en función del desarrollo del pensamiento crítico que pretende consolidar el espíritu de curiosidad de sus estudiantes, es así como en compañía de un tutor, los estudiantes preparan y sustentan un proyecto de investigación que tiene como eje central su propio interés. De esta manera, concluye el ciclo escolar que inició en Montessori, con esas primeras indagaciones donde las preguntas motivadoras, generaron espacios de actuación. Esa misma idea de proporcionar al estudiante una experiencia enriquecedora como lo señala Dewey sigue latente en este periodo escolar, pues es una forma de seguir enriqueciéndose cognitiva, social y personalmente.
En la preparación de los proyectos, en la búsqueda de la pregunta, aparece el deseo como motor que impulsa a actuar, a buscar respuestas o por qué no, a seguir preguntándose, pues es en la búsqueda constante, en el deseo, que se construyen pasiones, pero también se constituye en una invitación a poner en juego los saberes hasta aquí construidos, sus habilidades de pensamiento, para que desde ellas, puedan reconocer su entorno y reconocer-se en ese contexto como sujetos que construyen propuestas reflexivas sobre el conocimiento y su manera de aproximarse a él.
Pruebas Saber
Con las Asesorías Académicas de terceros expertos en el tema, el colegio ha tenido la oportunidad de evaluar, diagnosticar y retroalimentar el conocimiento de los estudiantes. A lo largo de los cuatro semestres, los alumnos reciben desde el colegio orientación y herramientas sobre la estructura de la Prueba de Estado, así como la realización de simulacros que les permiten asumir la Prueba de Estado con mayor confianza.
Acercamiento a la universidad
El colegio ha suscrito convenios con universidades como los Andes, la Pontificia Universidad Javeriana, el Rosario, la Sergio Arboleda, La Sabana, la Jorge Tadeo Lozano, entre otras, donde nuestros estudiantes cursan una o máximo dos materias de su interés, que serán avaladas por la universidad correspondiente, en caso de matricularse en ella. Las fronteras del conocimiento se extienden aún más con la asignatura universitaria que eligen los estudiantes al inicio del IV semestre. Dicha asignatura es opcional, puede verse en horas de la tarde y tiene el propósito de que los estudiantes encuentren una experiencia enriquecedora que les permita reconocer si las proyecciones y elecciones que realizarán en un futuro inmediato son las más adecuadas.

En clase en el Laboratorio de Tecnología.
Áreas del Conocimiento
Área de Ciencias
El Área de Ciencias ha construido un proyecto transversal sobre sustentabilidad, cuyo objetivo principal es reforzar el compromiso del colegio con la sociedad colombiana a través de la generación de conciencia, habilidades y valores necesarios para un futuro más justo, equitativo y sustentable. En este sentido se busca que la comunidad gimnasiana y los estudiantes en particular, generen conciencia, conocimiento, habilidades y valores para crear un futuro más justo y sustentable. Buscamos que relacionen las ciencias con la vida cotidiana y sean capaces de cambios de actitud, para que, sin importar la profesión que elijan, tomen decisiones ambientalmente responsables.
Desde el área se busca que los estudiantes se familiaricen con el método científico, con la manera como la ciencia se aproxima al estudio de la naturaleza, desarrollando la capacidad para pensar críticamente, presentar argumentos razonados y sacar sus propias conclusiones e inferencias con base en evidencia y no en comentarios sueltos.
Los tres ejes del área de ciencias son: física, química y biología. Por cuanto en ciencia no hay eventos ni procesos aislados y todo está integrado y forma parte de la evolución, los profesores debemos conocer los procesos y sistemas de la vida cotidiana para explicarlos desde los puntos de vista físico, químico y biológico. Recurrimos, por tanto, al método científico para crear, diseñar, observar y resolver. El trabajo práctico, con múltiples resultados, invita a la pregunta, al análisis y a aceptar el error como parte natural de la investigación. Se busca incidir en la vida de nuestros estudiantes para que se conviertan en mejores personas y construyan unas mejores relaciones con el medio.
Área de Matemáticas
Las matemáticas desarrollan el pensamiento analítico-gráfico y numérico para realizar inferencias y establecer proyecciones como un medio para interpretar contextos, tanto en el ámbito científico como humanista. Las matemáticas tienen su origen en fenómenos del entorno que se enlazan en una serie de abstracciones, generalizaciones o formalizaciones, teorías para producir conceptos y sistemas de ideas en general. Por esto, el Área de Matemáticas fundamenta su estructura en el desarrollo de cinco tipos de pensamiento (numérico, variacional, métrico, espacial y aleatorio), que ayudan al estudiante a acercarse al mundo que lo rodea, a estudiarlo, modificarlo y modelarlo, es decir, a interpretarlo. Esta forma de ver el mundo se construye en equipo y reconoce los aportes y limitaciones personales, los avances y debilidades individuales y de grupo.
La preparación de ciudadanos productivos y autónomos que se desenvuelvan eficientemente en una sociedad que evoluciona de manera permanente es el propósito de la educación matemática impartida en el Gimnasio. La formación en esta área, además de ser un requisito esencial para el estudio de una gran variedad de disciplinas, propicia en los estudiantes conocimientos, destrezas y formas de razonamiento que se requieren en su vida diaria. Se busca que el estudiante desarrolle hábitos y rutinas propias del quehacer matemático, que le permitan estimular la construcción de su propio conocimiento, el trabajo en equipo y su participación crítica en la toma de decisiones, tanto personales como sociales.
Área de Tecnología
El Área de Tecnología e Informática contribuye a que los estudiantes vean de forma estructurada la tecnología y propende porque desarrollen competencias, conocimientos, actitudes y aptitudes que les permitirán interactuar de manera comprensiva en su contexto o cotidianidad. Se han planteado dos estrategias encaminadas al uso, manejo y aplicación de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación. La primera es la alfabetización general de los conceptos informáticos, y la segunda, el apoyo a las demás áreas donde las TIC son una herramienta importante para el aprendizaje disciplinar y específico de cada una de las asignaturas del currículo.
La apuesta del Área de Tecnología se orienta a la identificación, análisis y gestión de problemas susceptibles de una solución tecnológica mediante una mirada crítica, ética y reflexiva frente a la realidad. Asimismo, contribuye al desarrollo de los proyectos transversales del colegio reconociendo que la presencia de los dispositivos y aplicaciones atraviesa actualmente todas las dimensiones de la experiencia.
El desarrollo de las múltiples lógicas en las matemáticas, ciencias y tecnologías potencia diferentes puntos de vista con argumentos sólidos, que favorecen el pensamiento crítico y constructivo en diferentes situaciones.
Área de Español y Literatura
El Área de Español tiene como objetivo primordial el fortalecimiento de la lengua materna y los valores propios del humanismo que siempre ha caracterizado al colegio. En el Área de Español y Literatura se forman los estudiantes en las competencias lingüísticas y discursivas que les permitan comunicarse con precisión y coherencia, de manera oral y escrita, en cualquier contexto o situación comunicativa. Desde el área se promueve la cultura literaria universal, de modo que el alumno sea capaz de comprender cualquier tipo de texto, analizarlo, sintetizarlo, así como asumir ante esos textos una posición argumentada. Sus profesores propician el goce estético de la lectura mediante la imaginación y la literatura, sus infinitas posibilidades para comprender de otra manera los problemas y los contextos, con el propósito de favorecer el desarrollo de los procesos lectores y escritores, el conocimiento y el buen uso de la lengua.
El estudiante, a través de la interpretación y fiel al espíritu humanista del colegio, se preocupa por incentivar una conciencia crítica y reflexiva con respecto a la vida. Vive el ejercicio de la libre expresión y cuestiona sus acciones a partir de la sensibilidad y la comprensión necesarias para afrontar la diferencia en todos sus ámbitos. Para esta tarea encuentra en la Agenda Cultural un espacio de profundización en el conocimiento de los autores de la literatura universal. Medios gimnasianos como El Aguilucho, El Pichón, El Huevito, La Emisora, el Proyecto de Periodismo Escolar por televisión son la cristalización de estos esfuerzos y la manera más auténtica de expresión de los estudiantes.
Área de Lenguas
El propósito central del Área de Lenguas es la formación de gimnasianos que, además de bilingües, sean conocedores del mundo, con mente abierta, dispuestos a desenvolverse en una sociedad global. El área procurará garantizar el desarrollo de las habilidades de aprendizaje del siglo XXI. El objetivo principal del área es buscar un alto nivel de competencia en idiomas como el inglés, el español, el francés y el portugués. Mediante nuevas estrategias y metodologías para enseñar idiomas, de acuerdo siempre con la filosofía del Gimnasio Moderno, los estudiantes crearán y afianzarán una conciencia cultural, construirán sus propias expectativas en la adquisición del nuevo lenguaje y desarrollarán la comprensión del lenguaje como un sistema.
Aprender idiomas en el Gimnasio Moderno ofrece, además, excelentes oportunidades para que los estudiantes desarrollen habilidades de liderazgo, solucionen problemas, adquieran destrezas para la investigación y aumenten sus competencias comunicativas. El Área de Lenguas contribuye a la formación de un gimnasiano bilingüe y multicultural, con una visión amplia del mundo y un gran interés en el conocimiento de las culturas locales y extranjeras.
Área de Ciencias Sociales
El Área de Ciencias Sociales trabaja en la formación de ciudadanos éticos, con una visión amplia de los fenómenos socioculturales de Colombia y el mundo, creando conciencia sobre la diversidad cultural y de las distintas expresiones sociales. Asimismo, al promover el desarrollo de habilidades de liderazgo y resolución de conflictos, enfatiza en la relación del estudiante consigo mismo y su entorno inmediato (familia, colegio, país). Promueve la investigación por medio de la interpretación y análisis de información y fuentes de diversos tipos, el cultivo del conocimiento interdisciplinario y la capacidad de ejercer liderazgo en diferentes disciplinas. Orienta al estudiante en la construcción de nación a través de la Cátedra de Paz y de reflexiones dirigidas a la acción en posibles escenarios de posconflicto.
El Área de Ciencias Sociales contribuye a la formación de ciudadanos éticos y reflexivos de sus actos, con habilidades de pensamiento crítico y un compromiso estrecho con su desarrollo personal, el de su comunidad y su país. Estas personas integrales, capaces de plantear interrogantes, buscar fuentes de información y proponer sus propias investigaciones, serán miembros responsables de su comunidad y promotores de paz por medio de sus palabras, acciones e iniciativas.
Área de Educación Física y Deportes
La educación física busca despertar en los estudiantes, a través del juego y las actividades físicas, una mayor conciencia de su cuerpo y del cuidado del mismo, fortalecer valores que permitan la colaboración y el compañerismo, el seguimiento de reglas de juego y el respeto por los otros. También se busca despertar en ellos las capacidades que les permitan afrontar mejor la derrota o la victoria, siempre en un ambiente de sana competencia.
La educación física tiene como finalidad proporcionar una formación integral adaptada a las aptitudes y diferencias individuales. El contacto directo y cercano en las clases favorece una relación sincera y abierta, donde los alumnos expresan con mayor libertad sus sentimientos y emociones. Es aquí donde las actividades físicas desempeñan un papel definitivo en el desarrollo y en la formación de los procesos biológicos y cognitivos de los estudiantes. Un egresado del Gimnasio Moderno conoce, practica y valora la actividad física como elemento indispensable para preservar la salud. Acepta las reglas para el funcionamiento grupal, respeta la autonomía personal, la participación y la valoración de la diversidad.
Área de Música
El área busca fortalecer competencias musicales (interpretativas, auditivas y creativas) en los niños y jóvenes por medio de talleres vocales, instrumentales y de apreciación. Se orienta a los estudiantes en la adquisición de formas de expresión artística mediante la interpretación de los diferentes códigos del lenguaje musical, con el objetivo de formar jóvenes sensibles y con capacidad de análisis, que puedan relacionar los contextos culturales a escala nacional e internacional, aprovechando el uso de recursos tecnológicos. Adicionalmente, se ofrecen espacios extracurriculares para quienes estén interesados en profundizar sus conocimientos en la Escuela de Música y desarrollar sus talentos artísticos.

La música, para dejar volar el espíritu.
El Área de Música contribuye al reconocimiento y aceptación de sensaciones, emociones y sentimientos, a la formación cultural, a la aceptación de la norma dentro de los parámetros del respeto, de los límites, la diferencia y la tolerancia.
Área de Arte
El Área de Arte aporta al estudiante una manera de ser y sentirse libre. El arte, más allá de constituir una herramienta o un instrumento al servicio de la comunicación, la cultura y la pedagogía, es ante todo la forma sensible que desde la antigüedad ha utilizado el hombre para generar vínculos de convivencia, expresión y experimentación. Igualmente la usó para desarrollar, conocer y aprender sobre sus propias experiencias. Las clases de arte en el colegio, enfocadas en el desarrollo del ser, están vinculadas al niño como una forma de interpretación de las propias percepciones a través de la producción expresiva, libre, espontánea y creativa. Por esta condición, el arte en el colegio tiene la necesidad de complementar, estimular y ampliar el radio de acción de cada impulso natural, único y diverso del niño.
Frente a la posibilidad libre y autónoma de elegir entre las líneas de expresión artística (expresión corporal, expresión plástica y expresión en nuevos medios), el área brinda a los estudiantes la oportunidad de experimentar con ellas y conocer cuál podrá tener una relación con su futuro, sea por vocación o gusto particular. Asimismo, incrementa en el estudiante la seguridad para leer imágenes y expresar en forma oral o escrita una mirada personal a partir de textos producidos en clase o en sus proyectos de investigación, con un lenguaje propio del arte. Esto desarrolla un sentido crítico basado en la experiencia y los conocimientos adquiridos en las clases.
Área de Formación en la Fe
Según el Preámbulo de los Estatutos de la Fundación Gimnasio Moderno, la educación religiosa es importante como parte de la formación mental y moral de los estudiantes. El objetivo de la Formación en la Fe en el Gimnasio es enseñar la religión católica desde su aspecto intelectual, cultural y humano. De esta manera, las clases de religión se dictan desde el humanismo y la comprensión de otras culturas, con un énfasis en los valores cristianos. Cabe anotar que el propósito último de este programa es que los estudiantes del Gimnasio desarrollen una dimensión espiritual, sean mejores ciudadanos y mejores personas, a través de un contacto profundo consigo mismos y con su mundo interior a través de prácticas como la reflexión, la gratitud y la auto observación, entre otras.

Sebastián Guerrero Garzón – 1 C
This post is also available in: Inglés